martes, 25 de agosto de 2009

Mi abuelo

Hoy hace 34 años que murió mi abuelo Juan. Al principio de este blog os conté alguna cosilla sobre él. Creo que si tuviese que definirle, sin haberle conocido, diría que ante todo era una muy buena persona.
Pues hoy, ahora, a las 20 horas será el aniversario de su muerte. Yo ya existía sin que mis padres lo supieran aún. Bueno, no exactamente yo, sino una pequeña célula que después, por casualidad, se convertiría en lo que soy ahora. Dicen los creyentes que una muerte puede estar ligada a un nacimiento. Que se puede crear un vínculo especial de tal manera que la persona que se va deja algo en la que viene. A mí me costó existir por muchos motivos. También nacer. Nunca sabré si hay un porqué. Nunca sabré si me protegía o no, si en los pasos que he ido dando desde entonces ha estado a mi lado. Ojalá fuese así.
No soy creyente pero muchas veces hablo con él. En los peores momentos le pido cosas, le pido que me proteja, a mí y a los que quiero, y en los mejores le doy las gracias... quizás pensando que ha tenido algo que ver. O deseándolo.
En estos momentos me encantaría creer. Me gustaría para decirle que le añoro sin haberle conocido, que le quiero por las cosas que he recibido de él en la inmensa o mínima distancia que ha habido entre nosotros desde que existo. No sé por qué. Mi madre tendrá mucho que ver...
Y sabes por qué te quiero abuelo? Porque hacen falta personas como tú en el mundo. Porque entre esta jauría de alimañas que nos rodea tú representas para mí el ideal de bondad, de sacrificio, de humildad, de ejemplo. No pudiste estudiar mucho, lo mínimo, porque tu familia necesitaba que trabajaras, y te ibas con un burro lleno de castañas cada día al pueblo de al lado para ganarte el pan. Siendo un niño. Pues abuelo, a mí me ha servido tu ejemplo para luchar en esta vida. Y aunque lo he tenido fácil comparado con lo que tú y muchos como tú vivisteis, todo lo que he conseguido ha sido gracias a mi esfuerzo, con mucha humildad y sin intentar pisar a nadie.
Pero contigo sobre todo he aprendido que se pueden echar de menos personas y lugares que no has conocido, que las raíces están donde te sientes a gusto y querido, y que los lazos los creas tú, sin que los imponga nadie.
Hace 34 años nos dejaste y yo empezaba a existir. Me perdí poder compartir contigo muchas cosas. Pero me has dejado tantas que te siento a mi lado... muy cerca... en estos momentos. Siempre te querré abuelo. Estés donde estés.

No hay comentarios: